TERRENO. El poblado de la región Norte señaló que lo ocurrido busca el despojo de la tierra comunal.   (Foto: Archivo NTR)

por Lauro Rodríguez / ntrguadalajara.com

8 de Noviembre de 2025

La comunidad indígena de San Lorenzo de Azqueltán, en Villa Guerrero, denunció nuevas agresiones en su contra que tienen como fin el despojo de la tierra comunal y acusó directamente a la Fiscalía del Estado (FE) por lo ocurrido. 

Según el relato vertido en un comunicado difundido ayer, el 4 de noviembre se dieron las agresiones, consistentes en amenazas y despojo de herramienta y material de construcción. 

“Alrededor de la 10:30 horas llegaron al predio comunal conocido como El Sabino Quemado, sin notificar a los comuneros titulares de dicho predio y sustrayendo una motobomba de 5 caballos de fuerza, buscando después a los comuneros en sus casas para advertirles verbalmente que ‘los pequeños propietarios ya demostraron ser los dueños’ y que ‘el juicio agrario les vale madre’, que si los encontraban dentro del predio, los iban a detener”. 

La comunidad agregó que “más tarde, cerca de las 11:30 horas, las mismas personas llegaron a la cabecera comunal, al predio conocido como Cueva del Mosco, donde otros dos comuneros trabajaban excavando un pozo. ‘¡Lárguense, hijos de su puta madre!’, les gritó uno de los agresores mientras les apuntaba con su arma. ‘¡Y no corran porque me los quiebro!’, añadió, picándole con el rifle la espalda a uno de los compañeros”. 

Tras las agresiones y el despojo, la comunidad responsabilizó a la FE de cualquier daño que pudiera sufrir alguno de sus integrantes. 

“Hacemos responsable de la integridad de los compañeros agredidos a la agencia del Ministerio Público de la Vicefiscalía Regional del Distrito XI, con sede en Villa Guerrero, Jalisco, donde presuntamente se habrían ordenado estas acciones ilegales”. 

Al respecto, la Fiscalía del Estado confirmó a NTR que sí fueron elementos de su corporación los que acudieron al sitio, pero negó la existencia de violencia y afirmó que no se trató de un robo, sino de un aseguramiento. El material y el equipo están retenidos en sus oficinas en Villa Guerrero. La dependencia estatal reconoció la existencia de una carpeta de investigación en contra de los comuneros, más no quiso dar detalles a este medio.