El defensor ambiental Higinio Trinidad fue hallado sin vida horas después de ser secuestrado. Participó en una organización que denunció el despojo de tierras por la minera Peña Colorada, además de que dio a conocer la tala ilegal en Manantlán. Foto de la red X

Juan Carlos G. Partida, corresponsal / la jornada

26 de febrero de 2024 20:31

Guadalajara, Jal. Elías E, policía municipal de Cuautitlán de García Barragán, detenido hace 10 días, fue vinculado a proceso penal por su probable participación en la desaparición en mayo pasado de los activistas nahuas Higinio Trinidad de la Cruz y Javier Flores Elías, ambos integrantes del Ejido de Ayotitlán enclavado en la sierra de Manantlán, en ese municipio al sur de Jalisco lleno de riqueza minera y forestal bajo el asedio y contrabando del crimen organizado.

“Dicho individuo al desempeñarse como agente de Cuautitlán de García Barragán, en compañía de más sujetos, al parecer mediante engaños sacaron a las víctimas de su domicilio para presuntamente entregarlos a miembros de la delincuencia organizada”, informó la Fiscalía el Estado cuando lo detuvo, el 16 de febrero anterior.

Este lunes se informó que Elias E fue vinculado a proceso, luego que un juez de Control evaluó que las pruebas aportadas por la Fiscalía Especial Regional permitían identificarlo como “uno de los probables partícipes” en la doble desaparición.

Aunque los dos líderes nahuas fueron puestos en libertad un día después de su desaparición de mayo, las amenazas continuaron y el 24 de noviembre, seis meses después, el ambientalista había sido citado a la presidencia municipal de Cuautitlán de García Barragán cuando desapareció.

De la Cruz era un importante promotor comunitario, quien denunciaba los despojos de tierras por la minería y tala ilegal, además realizaba proyectos de desarrollo sustentables con bancos de desarrollo internacional.

En un comunicado la organización Tsikini detalló que Higinio Trinidad fue victima de desaparición forzada.

El defensor de la tierra nahua, quien al igual que Javier Flores y varios nahuas más contaba con el supuesto cuidado del Mecanismo de Protección para defensores de derechos humanos y periodistas del gobierno federal, fue asesinado y su cuerpo dejado en el monte junto al camino de terracería que conduce al rancho Las Marías, dentro del Ejido Ayotitlán, con señales de tortura en su cuerpo y un disparo en la cabeza.

Según denunció Tsikini, Higinio Trinidad acudió a una cita con el presidente municipal Jesús Delgado Camberos ese 24 de noviembre y después no se supo más de él.

En enero pasado, se detuvo por el homicidio del activista y además consejero de la Comisión Estatal Indígena del Estado de Jalisco, a Juan Díaz El Charrascas, en una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social en la ciudad de Colima.

Eso amplió la línea de investigación a una disputa por el control de la mesa directiva de un ejido como Ayotitlán que, tras años de lucha legal y hasta marchas por los berenjenales de Jalisco hacia Colima, logró que desde hace más de una década la minera Peña Colorada pague por concepto de renta al menos 80 millones de pesos anuales a los ejidatarios por el uso de 800 hectáreas de su territorio.

Según el calendario ejidal, este año a más tardar en junio deberá realizarse la asamblea entre los integrantes del padrón que se beneficia y administra la millonaria suma, para elegir nueva mesa directiva, lo que según activistas cercanos a lo que ocurre en la región mantiene un estado de tensión que podría reflejarse en más hechos violentos.