Oct 22, 2022 | pagina24jalisco

Pueblos se mantienen en resistencia ante los desarrollos que atentan contra su territorio

Académicos y habitantes de dichas localidades charlan sobre la defensa del territorio y acciones en pro del rescate medioambiental y cultural en la zona

Para reflexionar sobre el impacto de los depósitos de basura, este viernes se realizó la conferencia “La Barranca del Río Santiago como espacio biocultural y conflictos socioambientales”, por parte de integrantes del Centro de Estudios e Investigación de la Barranca (CEIBA) y La Ceiba Biblioteca Comunitaria, de San Francisco Ixcatán/Fotos: Cortesía UdeG

Habitantes de los Pueblos de la Barranca del Río Santia­go se mantienen en resisten­cia ante los desarrollos que atentan contra su territorio, como los basureros que a lo largo de varias décadas se han instalado en el Norte de Zapopan.

Dichas localidades son: San Francisco Ixcatán, Co­pala, ExHacienda de Lazo, Huaxtla, Huilotán La Sole­dad, Los Camachos, Milpi­llas, San Esteban, San Isidro, San José, San Lorenzo (todas de Zapopan); así como Paso de Guadalupe (de Ixtlahua­cán del Río).

Para reflexionar sobre el impacto de los depósitos de basura, este viernes se realizó la conferencia “La Barranca del Río Santiago como espa­cio biocultural y conflictos socioambientales”, por parte de integrantes del Centro de Estudios e Investigación de la Barranca (CEIBA) y La Cei­ba Biblioteca Comunitaria, de San Francisco Ixcatán.

Esto, en el auditorio Fer­nando Pozos del Centro Uni­versitario de Ciencias Socia­les y Humanidades (CUCSH) , campus Los Belenes.

Josué Ernesto Rosendo Rentería, integrante del CEI­BA y doctor en Ciencias so­ciales por el CUCSH, recordó que actualmente los basureros de Hasars y Picachos son los que están activos y represen­tan “una violación al derecho de un ambiente sano”.

“Esta zona de sacrificio es una construcción que se hila de 1990 a la actualidad; desde ese año a la fecha se han insta­lado cuatro vertederos, de los cuales dos ya están cerrados, pero Picachos y Hasars están operando y su vida ya sobre­pasó los diez años”, contó.

“Algunas lecciones son que siguen brotando lixivia­dos después de 28 años del cierre del basurero de Copa­lita; esto tiene implicacio­nes en los mantos freáticos”, compartió.

Recordó que los residuos líquidos de la basura acumu­lada corre a los ríos Pedregal y Milpillas, mismo que llega a las conocidas cascadas de Huaxtla, un espacio natural a donde llegan visitantes del Área Metropolitana de Gua­dalajara (AMG).

“Sólo la gente de la ciudad es la que va a bañarse sin co­nocer bien que esa agua está revuelta con estos lixiviados. Después de la temporada de lluvias, tiene mucho de lo que corre del basurero y las aguas negras de los nuevos frac­cionamientos”, dijo Unberto Ruiz, integrante del CEIBA, quien recomendó no nadar en los ríos Milpillas y de la So­ledad.

“Hemos observado una proliferación de basureros clandestinos que no cum­plen los mismos protocolos ambientales”, dijo Rosendo Rentería.

Indicó que en los basure­ros activos, Hasar y Picachos, se entierra la basura y hay “un mal uso de la generación de gases”, pues se quema el gas metano y eso contribuye a la acumulación de gases de efecto invernadero.

“Las plantas de tratamien­to son muy pequeñas y hay escasa separación de basura”, y quienes lo hacen son per­sonas que trabajan en con­diciones precarias y de alto riesgo.

Hicieron hincapié en las redes de complicidad entre la empresa Caabsa Eagle y los gobiernos municipales, que realizan un gran negocio con la privatización del servicio pú­blico de recolección de basura.

“El pago por tonelada de basura es un elemento clave para entender este negocio; la separación implicaría que ese volumen de basura no sería lo mismo. Los gobiernos han menospreciado a la sociedad en el sentido de la capacidad del reciclaje, para la creación de compostaje y reciclaje de la basura”, indicó.

José Casillas también re­comendó que la gente que lle­gue a las cascadas de Huaxtla no entre a nadar a los ríos de la zona, y recordó “cuando el ex presidente municipal de Zapopan, Pablo Lemus, se tomó una selfie presumiendo que está muy bonito el sitio”.

Para conocer más so­bre las denuncias, estudios y publicaciones al respecto se puede consultar el sitio http://seguirenlatierra.org/, donde se abordan dis­tintas luchas de defensa del territorio por parte de acadé­micos y comuneros.

Activismo desde una biblioteca comunitaria

Mujeres habitantes de San Francisco Ixcatán, también pertenecientes a la comuni­dad de la UdeG, emprendie­ron el proyecto comunitario de la CEIBA Biblioteca.

Con apoyo del estímulo que otorga el Programa de Acciones Culturales Mul­tilingües y Comunitarias (PACMyC) de la Secretaría de Cultura de Jalisco, ellas lo­graron acondicionar un espa­cio de resistencia de la lucha comunal, a partir de activida­des artísticas y culturales.

Tanto Zariá Casillas, maestra en Ciencias Sociales por la UdeG y Heidi Serrano, antropóloga por la UdeG y pasante de la maestría de An­tropología Social del Colegio de San Luis (Colsan), son im­pulsoras activas de la CEIBA Biblioteca.

Ambas explicaron que en dicho espacio se realizan ta­lleres donde se busca acercar a habitantes de los Pueblos de la Barranca a tomar conscien­cia sobre los problemas de la zona y el rescate de tradicio­nes.

Todo eso, desde un peque­ño espacio ubicado en la pla­za delegacional de San Fran­cisco Ixcatán, que también ha recibido donaciones para lograr un refugio de libros y equipo al servicio de la ciuda­danía de la localidad.

Diana, una de las usuarias de biblioteca, compartió que acude al lugar después de la secundaria, “es un lugar para inspirarnos, para crear más”, dijo durante la presentación.

Para ver este encuentro, realizado este viernes, se pue­de reproducir su transmisión en https://www.facebook.com/Seguirenlatierra