Desde el día 20 de febrero, de manera inverosímil, la empresa CAABSA Eagle, la concesionaria de recolección y disposición final más grande del estado de Jalisco, solicitó a la SEMADET la evaluación en materia de impacto ambiental para la incorporación y regularización de 27 hectáreas más al vertedero Los Laureles, lo que daría 10 años más de “vida útil”, que se traduce en 5 millones de metros cúbicos más de basura depositados en este vertedero a cielo abierto.
El día 14 de abril, se desató un incendio descomunal que nos sitió a las poblaciones vecinas en una nube de humo letal, que por más de 5 días llenó nuestros pulmones de veneno, que a todos nos dañó en ese momento, que muchos tenemos secuelas hoy en día, que a otros tantos les ha perjudicado de por vida y que, a algunos más, desgraciadamente, ya no les ha permitido estar con nosotros. El incendió dejó en claro que la empresa no ha cumplido con aspectos básicos de la normativa, de la reglamentación y de la legislación que se supone debe regularla. Las condicionantes que le impusieron a CAABSA desde un inicio y en sus posteriores ampliaciones por el gobierno del estado, no han sido acatadas mínimamente, ¿por qué habría de ser diferente hoy si es que se llega a aprobar la ampliación? La anterior administración negó este mismo proyecto por no haber entregado la información que le solicitaban a la empresa. Sabemos que le han solicitado información complementaria. Si en esta ocasión CAABSA entregan esa información ¿se les va a conceder el deseo?
Lo que se discute no es algo menor. No estamos alzando la voz por un capricho, por algún interés partidista o monetario. Este no es un simple trámite más. Estamos hablando de nuestras vidas y nuestra salud. Por eso exigimos al gobernador Enrique Alfaro y a esta secretaría a cargo de Sergio Graf, que nos den una atención mayor a nosotros como afectados en este proceso de evaluación de la ampliación del vertedero Los Laureles. No podemos concebir que le den semejante atención a CAABSA después de todo el daño que ha perpetrado y que, hoy en día, nadie es capaz de negar u ocultar. Para ser partícipes de este proceso de evaluación, hicimos la solicitud de consulta pública el día 19 de mayo y es día que no hemos recibido respuesta de esta secretaría, tan sólo de la de Planeación y Participación Ciudadana, aunque la consulta tampoco se concretó con ellos y el foro que se organizó en Juanacatlán no fue tomado en serio por la mayoría de las instituciones que enviaron representación. Es por todo ello que este tipo de evaluaciones no pueden estar ocultas hasta su resolución. El reglamento de impacto ambiental debe cambiar urgentemente en los aspectos de inclusión, consulta e información abierta, para que quienes padecemos los estragos de los proyectos de tal magnitud, tengamos un peso justo y equilibrado en las decisiones que, a final de cuentas, nos afectan directamente.
Nosotros no concebimos que un gobierno que ha reiterado que quiere hacer las cosas distintas, de verdad esté considerando a detalle la posibilidad de darle continuidad a esta empresa para seguir operando este sitio que se atreven a llamar “relleno sanitario”, esta empresa que a vista de todos es tan irresponsable, tan siniestra, tan cínica y que tanto daño a hecho no sólo a estos pueblos, sino que ha pisoteado a las instituciones, que ha estado por encima de ellas gobierno tras gobierno. Como pueblos, no podemos soportar 10 años más de tantas agresiones a nuestro territorio y a nuestra vida cotidiana.
Queremos que sepan que los compromisos que tenga este gobierno con CAABSA no se pagan solo con los impuestos de los contribuyentes, sino nosotros con nuestra tranquilidad, con nuestra salud y con nuestra vida, y ya hemos pagado con creces. Estamos claros que esta no es una decisión técnica. Los “criterios técnicos” han justificado todas las decisiones que nos tienen sumidos en esta condición de muerte. La decisión de ampliar o no el vertedero, es una decisión completamente política, donde hay ganadores y perdedores; donde los ganadores son quienes ostentan el dinero y el poder y donde los perdedores somos siempre los mismos, los más pobres, los de abajo, los que habitamos esta obligada periferia. Si hubieran sido “otros” los criterios técnicos y hubiera habido un poco de justicia en las decisiones gubernamentales, no sólo estaría clausurado este sitio desde hace años, sino que estarían en la cárcel funcionarios que han permitido esto y los dueños de CAABSA.
Como habitantes afectados, campesinos, amas de casa, adultos mayores, jóvenes, trabajadores, estudiantes, artistas, niños, nos manifestamos el día de hoy para gritar ¡YA BASTA! Ya basta de que sigan utilizando nuestros pueblos como gran vertedero de la ciudad y de las industrias. Ya basta de que sigan tomando decisiones tan relevantes de manera oculta. Ya basta de seguir soportando permanentemente olores nauseabundos al punto de ni siquiera percibirlos. Ya basta de que nos sigan enfermando hasta hacer que este estado tenga números record a nivel mundial. Ya basta de que sigamos cayendo por muertes impuestas, sin haber sido capaces de solventar los gastos de los tratamientos. Ya basta de concebirnos como poblaciones y territorios de sacrificio para que la ciudad y la gran industria sigan expandiendo sus dominios. ¡YA BASTA!
Para hoy y para siempre
¡Tierra, agua y aire limpio para nuestros pueblos!
¡Fuera CAABSA de nuestro territorio!
