Tras la fuerte tormenta registrada la noche de ayer, la playa de Boca Negra amaneció este martes con una preocupante acumulación de basura a lo largo de su franja costera.

Botellas de plástico, envases de unicel, ramas, bolsas, residuos domésticos y otros desechos fueron arrastrados por la corriente desde arroyos y canales cercanos, como consecuencia del arrastre pluvial. 

Este fenómeno, que se repite cada temporada de lluvias, no solo afecta la imagen del destino turístico, sino que también representa un riesgo para la fauna marina y la salud pública.
Sé ha reiterado el llamado a la ciudadanía a evitar tirar basura y tomar acciones más contundentes para proteger las costas. La situación en Boca Negra es un reflejo del impacto ambiental que pueden tener nuestras acciones cotidianas, amplificadas por los efectos del clima.

Redacción: Alejandra Herrera