por Lauro Rodríguez/ntrguadalajara.com

 9 de Noviembre de 2023, 06:00 –

EL SALDO. El desbordamiento del 25 de septiembre dejó nueve personas muertas y una más desaparecida. (Foto: Especial)

Antes del desbordamiento del arroyo El Cangrejo en Autlán de Navarro, hecho registrado el 25 de septiembre y el cual dejó nueve personas muertas y una más desaparecida, investigadores del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) alertaron de deslizamientos en el municipio.

En un artículo científico publicado en la Revista Geográfica de América Central en su edición de enero-junio de 2023, las y los investigadores Fátima González Bolaños, José Luis Olguín López, Rubén Darío Guevara Gutiérrez, Carlos Palomera García, José Manuel Ramírez Romero y Víctor Manuel Villalvazo López advierten que más de 8 mil autlenses viven en zona de alto o muy alto riesgo por deslizamientos de tierra.

El texto, titulado “Identificación espacial del riesgo por deslizamiento de tierra en el municipio de Autlán de Navarro, Jalisco, México”, se publicó el 14 de julio, es decir, antes del desbordamiento.

La investigación analizó los factores de riesgo del municipio y concluye que los cambios de uso de suelo y la falta de planeación son sus causas principales.

De no atenderse la situación, el texto señala que habría daños en la infraestructura y pérdidas humanas, lo que terminó por suceder el 25 de septiembre tras el desborde del arroyo El Cangrejo. Según la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos Jalisco (UEPCBJ), lo ocurrido se trató del fenómeno denominado como “movimiento de ladera”.

“Se le debe poner atención prioritaria debido a que las superficies urbanas están ubicadas sobre material susceptible, aunado a la influencia de los factores climáticos. Según el análisis estadístico, se concluye que los suelos y la precipitación son los criterios que más influyen sobre el deslizamiento, por consiguiente, el cambio de uso de suelo en zonas de ladera puede ser un factor determinante para disminuir la problemática, sumado a una planeación en la distribución espacial de las zonas urbanas y la probable pérdida de infraestructura y vidas humanas”.

MÁS DE 8 MIL PERSONAS EN RIESGO

Las y los científicos apuntan en la investigación que al menos 8 mil 374 personas están en zonas de riesgo, ya sea regular, alto o muy alto. La gran mayoría vive en la cabecera municipal, donde se detectó a 5 mil 664 personas en riesgo.

El desborde del arroyo El Cangrejo y el huracán Lidia generaron, principalmente, afectaciones en las comunidades de El Jalocote, La Lima y, precisamente, la cabecera municipal. Las dos primeras no fueron incluidas en el estudio.

De las 16 comunidades que sí fueron consideradas, la cabecera municipal, Ahuacapán, Mezquitán, Bella Vista y Lagunillas es donde se detectó a la mayor cantidad de personas en riesgo por deslizamiento de tierra.

Las y los expertos también apuntan en el documento que la situación puede llegar a afectar a 2 mil 488 viviendas, de las cuales 422 están en zonas de muy alto riesgo: “(El riesgo) se da principalmente debido a la falta de superficie para construcción urbana en condiciones que limiten el proceso de deslizamiento de tierra, lo que obliga a construir viviendas cercanas a las zonas de laderas”.

La solución que proponen los científicos consiste en planificar el crecimiento de las manchas urbanas y habitables para evitar que existan construcciones en zonas de ladera. Además, sugieren evitar los cambios de uso de suelo en cerros para disminuir la erosión y, con ello, el riesgo del deslizamiento de tierra.

Bebé sobreviviente retorna a su hogar

Luego de ser arrastrada el 25 de septiembre por la creciente del arroyo El Cangrejo, una bebé fue trasladada al Hospital Civil de Guadalajara (HCG) Fray Antonio Alcalde para recibir atención médica y, después de varias semanas internada, ya fue dada de alta.

«La menor de 1 año y 9 meses que efectivamente fue arrollada, se egresó la semana pasada, específicamente el día viernes 3 de noviembre», afirmó el director del Civil Viejo, Rafael Santana Ortiz.

La menor llegó grave al hospital; de hecho, “estuvo entubada, después se extubo y empezó la alimentación”. A la bebé también se le hizo fue un injerto de cuero cabelludo “que afortunadamente va funcionando muy bien».

Tras su regreso a casa, a la menor se le dará seguimiento a través de citas semanales para revisar, principalmente, el avance del injerto y su estado de salud. Conforme evolucione, las visitas serán cada dos semanas y luego cada mes hasta que se le dé el alta totalmente. Nancy Ángel

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