
- Sistema de los Servicios de Agua Potable, Drenaje y Alcantarillado de Puerto Vallarta (Seapal). Foto: Cortesía
Violeta Meléndez/Mural
Guadalajara, México(25 marzo 2022).- Solamente el Sistema de los Servicios de Agua Potable, Drenaje y Alcantarillado de Puerto Vallarta (Seapal) es la única entidad en el estado que cuenta con certificación por parte de la Comisión para la Prevención contra Riesgos Sanitarios en Jalisco (Coprisjal) que le acredita que cumple con todas las normas oficiales mexicanas.
De acuerdo con Armando Pimentel Palomera, director de Fomento Sanitario de la Coprisjal, para obtener dicho certificado es necesario que los sistemas de abastecimiento acrediten una auditoría anual por parte de la dependencia para garantizar que su infraestructura y procesos se apegan a las normas.
En el caso del Siapa, al no contar con dicha certificación, evidencia que solo cumple parcialmente con sus obligaciones como organismo operador, de ahí que se haya acreditado que en los últimos dos años ha surtido agua con parámetros fuera de norma, desde coliformes hasta aluminio y cloro, así como altos niveles de turbiedad.
No obstante, el funcionario aseguró que el Siapa ya estableció contacto con Coprisjal para iniciar un proceso de certificación, para lo cual deberá renovar parte de su infraestructura, lo que demorará tiempo.
«Le decía a la gente del Siapa, me queda claro que el Siapa es un organismo operador que viene pasando de administración tras administración, pero se requiere meterle mucha lana, certificar un sistema de ese tamaño implica meterse en las redes que tenemos vieja», comentó el funcionario.
«Tienen el interés hasta donde yo sé, ya empezaron porque ya tuvieron acercamiento con nosotros, ya les dijimos por donde tienen que empezar, no digo que los vayamos a certificar ahorita y no sé cuando. En Jalisco sólo Seapal estuvo certificado hasta el año pasado».
Recordó, además, que existen problemas en el Siapa de fugas que no pueden ocurrir en un sistema certificado, además de renovar tuberías de más de 80 años que acreditó la Comisión Estatal de Derechos Humanos que ya no son eficientes y aportan a la contaminación del agua que se entrega a ciudadanos.
En tanto, personal de Coprisjal se trasladó la semana pasada a Vallarta para refrendar o retirar la certificación que ya tiene el sistema, y que acredita que dota agua de calidad.
«La revisión para una certificación es muy exhaustiva y escrupulosa, no podemos emitir un certificado cuando tiene carencias y no cumple con los aspectos que establece la norma, podemos decirles ‘ok, te vamos a certificar’ y si tienen algo que corregir que no implique un riesgo se les da un plazo de dos tres semanas, nada más», declaró Pimentel.
«Todo esto debe mejorar porque necesitamos avanzar, las enfermedades gastrointestinales ya no ocupan los primeros lugares en morbilidad ni mortalidad pero no es ninguna gracia, necesitamos tratar de garantizar agua de calidad como en otros países donde tomas del grifo directamente».
