
- Raúl Luna y María del Carmen Rocha Mendoza, padres de Miguel Ángel López Rocha, niño que murió a consecuencia de la contaminación del río Santiago, hace 14 años. Foto: Maricarmen Galindo
Violeta Meléndez/Mural
Guadalajara, México(10 febrero 2022).- El 13 de febrero de 2008 cambió para siempre la vida de Carmen Rocha Mendoza, su esposo y sus tres hijos. Ese día, su hijo mayor, Miguel Ángel López Rocha, murió tras caer al río Santiago y haberle detectado niveles de metales pesados por encima de los máximos tolerables para una persona.
A casi 14 años de la tragedia, que evidenció los alcances en la salud pública de la contaminación de ese cauce, Carmen y su familia siguen viviendo en la misma casa, pero algo dentro de ella se apagó. Aunque se esfuerza por sus hijos vivos, describe que sus alegrías no han vuelto a ser las mismas desde entonces.
«A mí se me hacen bien tristes estos días porque recuerdo todo, pero lo más triste es que prometieron sanear los ríos, que ya iba a estar bien y has de cuenta que no pasó nada. ¿Cuántos niños, cuántos inocentes más tienen que morir para llegar al corazón de los gobiernos? ¿Cuántas vidas más tienen qué cobrar?», cuestionó Carmen.
«Yo no quiero que haya más víctimas como mi niño, estamos dañados toda la familia, mis hijos que no han vivido mala vida, nomás la pobreza, están afectados por su hermano y porque me ven a mí también. Todos los años vivo con eso, yo tenía muchas cosas para mi niño en mente, quería que estudiara, que cumpliera sus sueños y mira».
En una rueda de prensa con activistas, la madre de familia y su esposo recordaron que tras el fallecimiento de Miguel Ángel, y el revuelo nacional que tomó la noticia, las autoridades se comprometieron a entregarle otra casa fuera de La Azucena, de donde su hijo cayó al río, así como a reparar el daño y sanear el cauce, lo que no ha ocurrido.
«A mí me prometieron que me iban a reubicar y que iban a arreglar el río, pero hay muchas casas abandonadas por lo mismo, la gente no quiere que se enfermen sus hijos», contó.
«Ha sido un cambio grande, ya no es la misma alegría así tenga mis tres hijos, los días de ahora que ya se acerca el aniversario me siento bien mal, me siento bien triste, como muerta en vida, pero delante de mis hijos no lloro, gracias a Dios, pero cuando no me ven me agarro llorando y con coraje porque no han resuelto nada».
Por su parte, su abogado reiteró que la familia ha interpuesto un cuarto amparo en busca de que las autoridades les concedan la reparación integral del daño, no solo económica sino con acompañamiento y tratamiento, pues a la fecha denuncian que no han recibido nada.
Además, las resoluciones previas que han obtenido a su favor las han combatido en tribunales y han derivado en que no se les atienda. En su cuarto amparo, los familiares exigen una reparación del daño por la muerte del menor que asciende a alrededor de 350 mil pesos.
«Que la gente no se quede callada, que hable, que no se queden impunes todas las cosas que están pasando en el río Santiago porque se está muriendo lentamente la gente en El Salto», exhortó la madre de Miguel Ángel.
Hora de publicación: 13:03 hrs.
