
- El que la Presa El Zapotillo opere a la mitad de su capacidad fue considerado un triunfo por habitantes de Temacapulín, Acasico y Palmarejo. Foto: Antonio Martínez
Violeta Meléndez/Mural
Guadalajara, México(12 octubre 2021).- Aunque reconocen que su lucha de 16 años fue en contra de la Presa El Zapotillo, el último acuerdo entre las poblaciones involucradas y el Presidente Andrés Manuel López Obrador para reactivar la obra y operarla a la mitad de su capacidad fue considerada como un triunfo no sólo para sus habitantes, sino también para Guadalajara.
En un manifiesto público que dieron a conocer en rueda de prensa, el activista Gabriel Espinoza reconoció que lo deseable para Temacapulín, Acasico y Palmarejo hubiera sido el desmantelamiento de la presa, sin embargo, lo posible fue llegar a un punto intermedio en donde se salven las comunidades y, al mismo tiempo, haya agua para la capital jalisciense, que en un inicio ni siquiera estaba contemplada en el proyecto.
«Lo que no se pudo detener porque los pueblos luchamos, Temacapulín es la capital mundial contra las presas desde 2010 y no vamos a renunciar, en el presente histórico (el acuerdo alcanzado) es lo posible, es lo que llaman los técnicos el reacondicionamiento de la obra para que no se inunden los pueblos y utilizar la infraestructura», declaró Espinoza.
«Ha sido un momento muy particular en donde nos ha servido a las comunidades de Temacapulín, Acasico y Palmarejo para madurar, para discutir, dialogar, proponer y fijar las posturas que son reconciliables y las que son irreconciliables. Al final no renunciamos a que son ríos para la vida, es un gran triunfo el que se puedan bajar los niveles, que significa reducir los gases efecto invernadero, podríamos pensar en el gran triunfo que se está teniendo».
Además, informaron que los especialistas que les dieron soporte técnico para elaborar la propuesta que el domingo admitió analizar el Presidente Andrés Manuel López Obrador fueron Jorge Acosta, consultor en hidráulica; investigadores de la Universidad de Delft, de Países Bajos, y un par de personas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
En la rueda de prensa, los investigadores reiteraron que la propuesta de la Comisión Nacional del Agua no ofrecía suficientes medidas de seguridad para las comunidades, por lo que plantearon la suya con adecuaciones como mantener la operación de la presa por debajo de 42 metros y habilitar un vertedor a esa altura sobre la cortina.
Sin embargo, el especialista Jorge Acosta reconoció que los detalles sobre esa alternativa técnica no están resueltos y corresponderá a la Comisión Nacional del Agua ajustarlos, lo cual implica nuevos estudios, presupuesto y volúmenes de agua por debajo de los 3.5 metros cúbicos por segundo que se preveían para Guadalajara inicialmente.
«Se tiene que recalcular todo para ver qué se puede aprovechar para Guadalajara pero la premisa es la salvación de los poblados, pronto va a llegar esa información, la vamos a revisar como técnicos. En cuanto al tamaño del vertedor también es decisión de Conagua, también lo vamos a revisar», respondió el especialista.
«Sí va a haber ajustes con esta contrapropuesta pero recuerden ustedes que en el proyecto original de 80 metros el agua era para León, Guadalajara estaba fuera, es decir, la demanda que tiene Guadalajara con una presa a 78, 48 metros le da su demanda», añadió María González, del IMDEC, quien exhortó a la población de la metrópoliHora de publicación:
