
Fernanda Carapia/mural
Guadalajara, México (07 septiembre 2021).- La inundación en varias colonias de Tlaquepaque, como Ojo de Agua, Juan de la Barrera y La Duraznera, fue una crónica anunciada.
Con anuencia de las pasadas Administraciones municipales, la Presa El Órgano se rellenó, pese a la advertencia de la Comisión Nacional de Agua del riesgo que existía al restar el volumen de regulación.
«Su desaparición no se dio de la noche a la mañana. Ha sido un proceso de no menos de 10 años. En ese periodo no ha habido o se ha ejecutado un plan para recuperar la capacidad de regulación perdida, a pesar del riesgo para las colonias de los alrededores. Ahí las consecuencias», comentó el especialista Josué Daniel Sánchez Tapetillo.
Este vaso regulador, ubicado a un costado de la Presa Las Pintas, está dividido por la Carretera a Chapala. La parte poniente tiene dueños, pero la oriente, según documentos en poder de MURAL, pertenecían a un Ejido el cual donó el predio para que fuera vaso regulador, pero no se concretó, por lo que las 16 hectáreas quedaron en una indefinición.
En 2005, la presa estaba catalogada como área de protección de cauces, que impedía realizar labores de relleno o urbanización, sin embargo, en la Administración del Alcalde Alfredo Barba (2012-2015) se dio el cambio de uso de suelo a mixto por orden de un Tribunal Federal, según dijo él.
Las Administraciones posteriores no hicieron nada por recuperar estos terrenos y atender tanto la recomendación de la Conagua como de Derechos Humanos por el riesgo que había.
Desde entonces, la presa se convirtió en un «tiradero» de escombro que rellenó su capacidad, incluso, MURAL publicó en septiembre de 2017 que los terrenos fueron vendidos de manera ilegal y dos años más tarde, el vaso regulador había sido bardeado.
El Imeplan detectó en esa zona nuevos puntos de inundación de hasta 90 centímetros, uno en el cruce de Frailes y Evangelio, en La Duraznera y que este viernes se anegó.
Sánchez Tapetillo comentó que el relleno de El Órgano restó la capacidad de almacenamiento de agua en el sistema y fue uno de los múltiples factores de la inundación que afectó por lo menos 635 viviendas, según Protección Civil.
«Se desaparece el volumen, que hoy está lleno de suelo, es el volumen que hace falta para almacenar agua y esta agua que no se puede almacenar. Continúa hacia las colonias alrededores sin ningún tipo de regulación y termina desbordando la presa y causando la inundación».
La solución, dijo, es compleja, pues lo que se tendría que hacer es recuperar el cauce de los arroyos y de la presa, lo cual puede ser casi imposible porque representa la expropiación de terrenos y la reubicación de asentamientos humanos.
