• Las tuberías del vertedero registraban una fuga que liberó lixiviados a la atmósfera. Foto: Ángel Llamas

Violeta Meléndez /mural

Guadalajara, México (06 agosto 2021).- A tres semanas de que se cumpla el plazo de dos años que fijó el Gobernador Enrique Alfaro para cerrar el basurero metropolitano Laureles, Caabsa incumple con las obligaciones que marcó la autoridad para un abandono seguro del vertedero.


Uno de sus incumplimientos al Plan de Rehabilitación, Cierre y Abandono que autorizó la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial el 23 de julio del 2020, es el control y saneamiento de los 38 mil 67 metros cúbicos de lixiviados que almacena en fosas.

El compromiso de Caabsa fue enviar 420 metros cúbicos diarios de lixiviados a la planta de tratamiento de aguas residuales domésticas Agua Prieta, en Zapopan, a partir de julio del año pasado, hasta vaciar las 11 fosas que contienen dichos residuos.

Sin embargo, de acuerdo con sus informes bimestrales obtenidos vía transparencia, hasta el 1 de julio del 2021 solamente había tratado el 16 por ciento de los lixiviados que reportó en el plan de cierre y abandono, es decir, 6 mil metros cúbicos, sin incluir los que circulan por el vertedero con la finalidad de que se evaporen.

En una visita que realizó MURAL a Laureles el 4 de agosto, a través de la comunidad de Tololotlán, de Tonalá, se documentó que el vertedero descarga lixiviados hacia el arroyo y camino que conduce a dicha población.

Además, sus tuberías registraban una fuga que liberó lixiviados a la atmósfera y suelo a manera de géiser, de forma ininterrumpida. Estos residuos cuentan con metales pesados como plomo y cromo, según los estudios de laboratorio adjuntos en los informes de la concesionaria.

Dicha práctica constituye un delito ambiental tipificado en el artículo 416 del Código Penal Federal.

Otro incumplimiento es cubrir las montañas de basura con material pétreo impermeable para evitar que se disperse y, con las lluvias, genere más lixiviados. La propia Caabsa reporta que aún tiene 3.57 hectáreas de basura a cielo abierto.

Para el especialista en rellenos sanitarios, Gerardo Bernache Pérez, que las autoridades permitan a Caabsa abandonar Laureles sin cumplir medidas de seguridad compromete la salud pública de la zona por 100 años.

«Es una contaminación superficial por lixiviados que escurren hacia el Río Santiago y Tololotlán, y por otra parte hay una filtración hacia el subsuelo, los mantos freáticos están contaminados», explicó.

Laureles recibe el 60 por ciento de la basura generada en el Área Metropolitana de Guadalajara, y aunque su cierre está previsto para el 1 de septiembre próximo, no hay un lugar concluido para gestionar los residuos.

Huele mal

Los compromisos adquiridos por Caabsa para cerrar el basurero metropolitano Laureles:

Compromisos                                             Avance
Cobertura de basura                                       95%*
Tratamiento de lixiviados                                16%
Realización de 11 estudios                        2 estudios
Manejo de gases                                            Nulo
Estabilización de montañas de basura           Nulo

* No se ha evaluado si la cobertura reportada cumple con las condiciones de impermeabilidad.

Fuente: Informes bimestrales de cierre y abandono Caabsa.