
La captación de agua de lluvia es un mecanismo de abasto para la población humana que data desde tiempos inmemoriales, distintas civilizaciones de la antigüedad recurrían a ésta para realizar sus actividades.
Sin embargo, la modernización en los sistemas de suministro desplazó la captación doméstica por la comodidad que supone solo abrir la llave y pagar una cuota a cambio.
Con el paso del tiempo, la escasez ha ocasionado que distintas ciudades volteen a ver nuevamente estos sistemas ancestrales no solo para bajar la presión en lagos y pozos que les abastecen, sino también para mitigar las inundaciones.
A continuación detallamos cómo se conforma un sistema de captación de agua de lluvias doméstico, de acuerdo con el que adaptó el académico de la Universidad de Guadalajara Arturo Gleason Espíndola.https://graficos.gruporeforma.com/elementor-122728/?version=202106241703
1. Captación y conducción

El primer paso para acopiar el agua es identificar las zonas de la casa donde escurre la lluvia para colocar canaletas y dirigirlas a un espacio donde será almacenada el agua.
Arturo Gleason recomienda tener un tinaco o tambo especial para recibir las primeras lluvias, pues será el agua más sucia que puede usarse para regar las plantas o lavar exteriores.
Cuando se establezca el temporal y el agua tenga mejor calidad, entonces ya puede dirigirse a una cisterna para fines domésticos.
2. Cisterna y bombeo

Una vez encauzada el agua, toca enviarla a una cisterna limpia, la cual podrá ser utilizada gracias a una bomba que la succionará y dirigirá a las tuberías de la vivienda.
La de la imagen corresponde a una cisterna colocada de manera subterránea.
3. Purificación y Distribución

Antes de que el agua llegue a los baños y cocina de la casa, debe pasar por un sistema de filtros y emisión de rayos UV que garantizarán que el volumen distribuido esté libre de microorganismos e impurezas.
Con este paso se consigue salubridad en el agua y un incremento en la vida útil de la red hídrica de la vivienda.
Al terminar esta fase, entonces el agua se puede disfrutar para bañarse, lavar platos, las manos, el inodoro, e incluso para beber si se colocan los filtros adecuados.
¿Qué otros mecanismos se pueden usar?

Si no se está en la posibilidad de adquirir e instalar el equipo antes mencionado, que puede oscilar entre los 20 mil y 40 mil pesos, hay otras formas de no desperdiciar la lluvia.
Encauzar el agua desde los techos hacia un tambo o cubetas es la principal opción, como en la imagen, que corresponde al agua de la primera lluvia del año, que resulta con alto nivel de turbiedad y solo sirve para riego.
La ventaja es que su mantenimiento es sencillo, pero hay que mantener cubiertos estos almacenes para evitar accidentes o que se conviertan en criaderos de moscos.
Para conocer otras alternativas, así como asesoría técnica y capacitación, la Asociación Mexicana de Sistemas de Captación de Agua de Lluvia tiene su sitio web donde atiende inquietudes para los interesados en equipamiento de estas características.
