Violeta Meléndez/Mural

Guadalajara, México (28 febrero 2021).- El Bosque La Primavera es Reserva de Biosfera y pista de ciclismo sin regulación.

El Organismo Público Descentralizado tiene registradas 16 rutas de ciclismo que abarcan 80.4 kilómetros lineales dentro del bosque, sin embargo 80 por ciento de dicha extensión se encuentra en zonas de uso restringido, de protección o recuperación, según la zonificación del plan de manejo vigente.

Es decir, contravienen la normatividad aplicable para regular las actividades dentro del Área de Protección de Flora y Fauna.

Así lo revela el Documento Base para la Actualización del Programa de Manejo 2018-2023 de La Primavera en poder de MURAL, obtenido vía transparencia.

Este insumo especifica que el ciclismo es una actividad descontrolada de cuyas rutas vigentes, solo 20 por ciento están trazadas dentro de la zona de uso público, donde se permiten prácticas lúdicas.

Además, señala que únicamente 10.3 kilómetros de los 80.4, se han equipado con tarimas y medidas suficientes para evitar la erosión del suelo. Se trata de las rutas Toboganes, La Mosca y Garrison.

«Un problema crítico es la erosión (…) agravado por la densidad de visitantes usando automotores y bicicletas (…) En algunos tramos de rutas ciclistas sin infraestructura se registra la pérdida de hasta un 75% del horizonte superficial del suelo».Programa de Manejo 2018-2023 de La Primavera
El resto carece de protección física y regulación.

«Un aproximado de 10.3 kilómetros se han integrado a proyectos de restauración, para lo cual se tuvo el consenso de los propietarios involucrados, representantes de ciclismo y usuarios, sin que esto signifique que estos senderos estén en un proceso de oficialización», indica el diagnóstico.

«Un problema crítico es la erosión provocada por caminos, veredas y senderos, agravado por la densidad de visitantes usando automotores y bicicletas (…) Por ejemplo, en algunos tramos de rutas ciclistas sin infraestructura, se registra la pérdida de hasta un 75% del horizonte superficial del suelo», por lo que urge a regular las actividades recreativas.

El documento base para actualizar el plan de manejo, que desde el año 2000 no se ha renovado, incluye entre las principales presiones internas del bosque la débil regulación del ciclismo, después de otras como el incremento de la propiedad privada y la edificación hormiga.

Si bien el director del bosque, Marciano Valtierra, mencionó el miércoles en Junta de Gobierno que los ciclistas no contribuyen económicamente para acciones de restauración de suelos pero sí en especie, Sotirios Lambros, miembro de la Asociación Civil MTB pro Bosque, indicó que su aportación con insumos fue de 970 mil pesos.

Sin embargo, las obras de restauración de suelo corren a cuenta del erario. El OPD asignó este año 700 mil pesos de su recurso para trabajos de conservación de suelo erosionado en las rutas ciclistas. Se trata de la segunda inversión de este tipo, la primera fue en 2018 por un millón de pesos.

El propio Lambros, antes de representar grupos ciclistas, reconoció el 10 de mayo de 2018 el alto impacto de la actividad lúdica-deportiva y por lo cual llamó a regularla para minimizar sus consecuencias.

«Lo que pasa con el ciclismo es que una vez que ya te acabaste la capa vegetal, que se va rapidísimo, aparece la capa mineral, obviamente con el tránsito de ciclistas y corredores se expone mucho más y la capa mineral se va desgastando hasta que te topas con el jal», explicó.

«El problema es que una vez que la llanta toca la capa de jal se empieza a erosionar y no hay prácticamente nada que lo frene», consideró en ese entonces en entrevista.
El ciclismo en La Primavera
16 rutas detectadas

3 equipadas

80.3 km lineales

80% incumple la zonificación vigente