Diariamente se arrojan 6 mil 869 metros cúbicos (m3) de aguas tratadas al embalse de la Laguna de Cajititlán. Foto: Archivo

Julio Cárdenas/Mural

Guadalajara, México (03 enero 2021).- Aguas residuales de uso industrial, público y de servicios recibe la Laguna de Cajititlán.

De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) existen cinco autorizaciones vigentes para descargar agua tratada al embalse ubicado en Tlajomulco de Zúñiga, que suman un volumen de 6 mil 869 metros cúbicos (m3) al día.

Eso equivaldría a 343 pipas diarias o 10 mil 303 pipas mensualmente vertidas hacia la laguna que tiene una capacidad de almacenamiento de 54.4 millones de metros cúbicos.

Según el Registro Público de Derechos de Agua de la Conagua, los titulares de los permisos son el Sistema de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento de Tlajomulco; Tres Reyes de Cajititlán SA de CV y Barcel SA de CV.

El primero cuenta con un volumen de hasta 6 mil 653.00 m3 al día de agua de uso público urbano que se vierte de las plantas de tratamiento ubicadas en San Miguel Cuyutlán, Cajititlán y San Juan Evangelista.

Le sigue el de Tres Reyes de Cajititlán SA de CV con 76 m3 diarios de agua de servicios y el de Barcel SA de CV con 140 m3 al día de aguas industriales tratadas.

La laguna tiene metales pesados como aluminio, bario, manganeso, mercurio, sodio y zinc por encima de la norma. El mercurio produce lesiones renales, colitis y gastritis en los humanos, según la OMS.

«El 95 por ciento de las plantas de tratamiento no operan adecuadamente, se tienen que diseñar con relación al contaminante y el volumen que vas a tratar».José Antonio Gómez ReynaInvestigador de la UdeG
Además de que según la cooperativa de Pescadores de Cajititlán, el lirio se expande entre 5 y 10 hectáreas de las mil 700 que tiene de extensión el embalse.

Esa maleza acuática representa un peligro para la disponibilidad del agua y favorece el desarrollo de vectores de enfermedades graves y hasta mortales, según el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).

José Antonio Gómez Reyna, profesor investigador de la UdeG, señaló que para lograr el saneamiento de la laguna es necesario empezar con cancelar todas las descargas de aguas contaminadas y residuales.

Advirtió que las plantas de tratamiento no están diseñadas para tratar contaminantes emergentes como las hormonas, antibióticos, nano materiales, entre otros.

«El 95 por ciento de las plantas de tratamiento no operan adecuadamente, se tienen que diseñar con relación al contaminante y el volumen que vas a tratar», dijo el experto.

«Y ahí en el lago pues imagínate el volumen que tiene de agua estarlo tratando, pero siguen recibiendo contaminantes, pues nunca acabas»