La Laguna de Cajititlán es afectada por descargas de aguas residuales procedentes de vivienda y actividades primarias y secundarias de las poblaciones cercanas. Foto: Jorge Rangel

Julio Cárdenas/Mural

Guadalajara, México (26 octubre 2020).- Una ruta de trabajo de cinco a seis años se plantea el Gobierno de Tlajomulco de Zúñiga en el saneamiento de la Laguna de Cajititlán.

Adrián Salinas, director de Cajititlán Sustentable, explicó que la estrategia es invertir en humedales, captar escurrimientos pluviales y cancelar descargas de contaminantes que permitan mejorar las condiciones del cuerpo lacustre.

«El proceso de saneamiento que se tendría que llevar sería natural, por eso lo que se buscó en este proyecto es cerrar el paso de aguas contaminadas», expuso el funcionario.

«Estaremos hablando de que año con año con el estudio hidrológico que se está haciendo y con la canalización de aguas pluviales a la laguna y la salida de lodos, podremos estar hablando de unos cinco o seis años estará en condiciones ya mejores».

El proyecto surgió del foro Cajititlán Sustentable que se realizó a principios de 2019 con la participación de académicos, activistas, vecinos y funcionarios.

Durante esta Administración se han invertido 31 millones de pesos en arreglos de canales y construcción de humedales.

«Tenemos un proyecto muy claro, lo más importante es que este proyecto es físico biológico, es decir que la única energía que va a requerir es la solar y la fuerza de gravedad. Eso lo hace sustentable», destacó Salinas.

Además de que fue ampliada la planta de tratamiento de San Miguel Cuyutlán y está en proceso de licitación otra en Eucaliptos.

«No se han visto avances en las acciones del saneamiento de la laguna, incluso creo que se deterioró un poco más porque en estos dos años de Administración no ha habido ninguna acción contundente ni mucho menos una presentación de resultados», señaló Verónica Delgado, regidora de Morena en Tlajomulco.

La también presidenta de la Comisión de Medio Ambiente y Sustentabilidad en el Ayuntamiento considera que hace falta que el Municipio se sensibilice con el problema y le asigne más recursos, pues alertó que ya está afectando a la salud pública.

Entre la población, la realidad está a la vista todos los días.

«Sigue la contaminación muy fuerte, la última vez que nos dieron los índices de contaminación nos dijeron que ya tenía metales pesados donde en la mañana nos decían que no deberíamos de salir a correr cuando veamos que el agua está evaporando», expresó Noemí Enciso, habitante de Cuexcomatitlán.